240
Evita el Agua Caliente: El agua caliente puede eliminar los aceites naturales de la piel y empeorar la sequedad. Opta por agua tibia o fría al lavar tu rostro y evita los baños prolongados en agua caliente.
Nutrición desde Adentro: No olvides que la hidratación también viene de adentro hacia afuera. Asegúrate de beber suficiente agua durante el día y consumir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras y ácidos grasos esenciales para mantener tu piel saludable e hidratada.
Con estos simples consejos y cuidados, podrás combatir la sequedad y lucir una piel radiante y luminosa. ¡Recuerda que una rutina de cuidado de la piel consistente y amorosa es la clave para una piel feliz!